domingo, diciembre 31, 2006

Un año que se me va


Un suspiro, eso ha sido. No me he enterado apenas de que ya se nos va este 2006. Faltan unas horas para que empiece el nuevo año. Camisa nueva, zapatos y la chaqueta... y eso que dijimos que no nos lo íbamos a tomar muy en serio esta vez...

Ahora empieza la parte que más me gusta de la navidad (y eso que no me gusta nada). Es una excusa para encontrarnos con aquellos que tenemos cerca y lejos. El móvil no deja de sonar y he tenido que tirar de imaginación para escribir un mensaje original. Una vez al año no hace daño.

Por unos segundos no podremos enfadarnos y nos olvidaremos de nuestras miserias. Siempre suelo decir que la lástima es que esto no ocurra el 17 de agosto, por decir un día, pero no le pondremos mala cara, al fin y al cabo una vez al año no hace daño.

Es en este momento también cuando apago las luces de la habitación y miro por la ventana a las luces navideñas de la calle. Este año toca una paloma con ojo rojo que parece haber bajado de algún infierno. Hago balance. Me sale positivo.

Entra mi madre y da un último retoque a la camisa. Los dará muchas más veces a lo largo de la noche. Ya empieza a oler la cena y algunos amigos tocan el timbre de casa. De fondo escucho aquel CD de villancicos de Frank Sinatra y Bing Crosby que me regalaron.

Este año he prometido no ponerme triste y no lo voy a hacer. No, porque tampoco le veo mucho sentido. No estoy con todas las personas con las que me gustaría estar pero ya les haré llegar todo mi cariño. Lo he prometido, pero casi casi es imposible no dejar escapar una lágrima al pensar que el tiempo pasó demasiado deprisa... Este año fue eso, un suspiro.


FELIZ 2007

No hay comentarios: